Publicado 22 noviembre 2024. Fuente: SERVIMEDIA
Cuatro de cada diez personas trans y no binarias creen que sus profesionales sanitarios no saben cómo atender al colectivo. Así se concluye tras la presentación del ‘Estudio Transaludes: salud en personas trans y/o no binarias en España, 2024’, realizado por un equipo de la Escuela Nacional de Sanidad del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII).
Liderado por la científica del ISCIII María José Belza, el informe analiza a nivel nacional el estado de salud de las personas trans y no binarias. Su objetivo es aumentar el conocimiento sobre la salud de esta comunidad y facilitar posibles mejoras en su acceso a los servicios sociosanitarios. "En España hay poca información que permita cuantificar a nivel nacional el estado de salud y las dificultades por las que pasan las personas trans y no binarias a la hora de recibir servicios adecuados a sus necesidades de salud”, afirma.
Abordar la salud
El equipo de investigación destacó la importancia de abordar la salud de las personas trans y no binarias desde la despatologización, entendiendo la identidad de género como parte de la diversidad humana y no como una enfermedad o trastorno, y con un marco no estigmatizante. “Es importante entender que la salud, y especialmente la salud mental, está muy influenciada por las situaciones de discriminación y otros tipos de violencia a las que las personas trans se enfrentan”, asegura Belza.
La encuesta Transaludes revela que sólo el 10% de las personas trans y no binarias se habían visibilizado en todas las esferas de su vida y que un importante porcentaje no había podido realizar los cambios de nombre o de sexo registral que deseaba, tanto por miedo al rechazo como por barreras en el proceso administrativo, especialmente entre las personas no binarias.
Respecto a los procesos médicos de transición, también un gran porcentaje de las personas que querían realizarlos refirió en la encuesta no llevarlos a cabo por diferentes motivos. Entre ellos, destacan la preocupación a la discriminación a la que pudieran enfrentarse y las barreras sanitarias y largas listas de espera en la sanidad pública, que hicieron que dos tercios de las personas que habían realizado alguna transición quirúrgica acabaran haciéndolo en la sanidad privada.
Violencia
La práctica totalidad de las personas trans y no binarias participantes había sufrido algún tipo de violencia tránsfoba o discriminación por su identidad de género a lo largo de su vida. Casi la mitad de las personas participantes habían sido agredidas físicamente en algún momento. La encuesta refleja que estas agresiones tuvieron repercusiones en la salud de ocho de cada diez personas que las sufrieron.